No hace tantos años, cuando nuestros padres nos sentaban a su lado en cualquier comida de celebración, imaginábamos lo que sería nuestra fiesta ideal: tendría que tener toneladas de golosinas, pasteles, pizza y una tarta gigante.

En la actualidad, gracias a cómo ha evolucionado la animación de fiestas infantiles, esto se ha hecho realidad. Es cada vez más habitual contar con payasos para fiestas infantiles o con animaciones de cumpleaños, por ejemplo. Y, cómo no, en todos estos eventos la comida va a tener un claro protagonismo.

Cuida mucho la presentación

Lo primero que has de saber es que, en un catering para niños, la presentación es fundamental: la comida, además de estar rica, ha de ser divertida. Jugar con formas, colores o figuras de personajes es lo que va a garantizarte el éxito.

La comida, sencilla y atractiva

En una jornada así para los niños, con tantas animaciones infantiles -especialmente si hemos optado por el alquiler de castillos hinchables, capaces de suscitar auténticas revoluciones- hemos de contar con un menú especialmente atrayente.

Evita los alimentos gourmet o sofisticados. Mejor, recetas con sabores sencillos y una presentación que permita moverse libremente y comer con las manos.

Bocadillos y emparedados (rellenos de nocilla, jamón, queso…), pizzas o minihamburguesas y perritos son apuestas seguras, pero también puedes sorprender con croquetas de chocolate, piruletas de queso o caramelos de salchichas, recetas que parecen magia y que les encantarán.

Recuerda también un lema: en las fiestas infantiles: a ser posible, introduce alimentos con temáticas de sus personajes y dibujos favoritos.

Y para un final súper divertido, móntales su propio bufé: que puedan elegir el postre en una Sweet Bar (cupcakes, tartaletas, pasteles…) o disfrutar, en una Candy Bar, de barra libre de golosinas de todos los colores y sabores. Será la guinda perfecta para una jornada llena de emociones, animaciones infantiles, payasos, risas y deliciosa comida de colores.

Llega la hora de organizar una celebración y surgen dudas sobre qué hacer con los niños. No lo pienses más. La mejor opción es el alquiler de castillos hinchables.

Animación de fiestas infantiles

Al cuidado de los niños

Los equipos de animación son especialistas que no solo divertirán a los niños, sino también a los adultos. Es normal sentir preocupación y tener la sensación de que dejamos a los niños sin supervisión durante las animaciones infantiles, pero lo cierto es que con un equipo de animación no tendrás de que preocuparte.

Ya sea una boda, una comunión, un bautizo… Hay quienes optan por payasos para fiestas infantiles, quienes hacen juegos, bailes e incluso manualidades con los más pequeños.

Castillos hinchables

Sin duda alguna, el alquiler de un castillo hinchable para animaciones de cumpleaños o cualquier otro tipo de fiestas infantiles es todo un acierto. Ya sabemos que los niños necesitan continuamente una distracción y no hay que negar que el mero hecho de visualizar un castillo hinchable los hace querer estar saltando todo el día.

Un castillo hinchable es todo un entretenimiento para los niños. Así, querrán permanecer en el evento mientras los mayores podrán disfrutar, al mismo tiempo, sin necesidad de preocupación, pues siempre habrá supervisores encargándose de su seguridad.

Si aún tienes dudas de si alquilar un castillo hinchable es la mejor opción o no, deberías saber que además, puedes escoger entre diferentes tipos de hinchables según lo requiera la ocasión y la época del año, por lo que el acierto está asegurado: para saltar, para refrescarse, para formar un futbolín humano… Cualquier opción es atractiva para todos.

No hay que negar que incluso a más de un adulto le atrae la idea de divertirse saltando dentro del castillo. Por este motivo, el alquiler de castillos hinchables siempre será una excelente idea que hará que todos disfruten al máximo de la celebración.

La animación infantil es una parte esencial de las fiestas del verano, cuando los más pequeños de la casa tienen tanto tiempo libre y siempre exigen algo nuevo y que les divierta. Las fiestas de la espuma son divertidas alternativas que comienzan a llenar las festividades tanto públicas como particulares.

¿Recuerdas cuando jugabas en tu bañera con la espuma? La espuma siempre ha sido un elemento de diversión para niños y mayores y hace ya mucho que este concepto funciona muy bien en discotecas y grandes fiestas, donde la espuma convierte una simple celebración en una auténtica celebración por todo lo alto. Trasladarlo a los niños solo era cuestión de tiempo: muchas localidades de nuestro país ya incluyen fiestas de la espuma como parte de la animación para fiestas patronales, finales de curso y un largo etcétera.

Las fiestas de la espuma se celebran en entornos controlados y seguros para los niños, con monitores que vigilan y les divierten, música, castillos hinchables y juegos de todo tipo. Las ventajas son muchas: la espuma, que no es simple jabón, no provoca alergias de ningún tipo, no mancha y está compuesta, en un 90 %, de agua fresca, algo que se agradece en este abrasador verano y evita los golpes de calor de los más pequeños. También está controlada la cantidad que se lanza, para que el chorro continuo refresque y divierta a los niños sin provocar accidentes. Gracias a esto, la espuma se convierte en una aliada de la diversión, pero también de la seguridad; al evitar que los niños puedan sufrir de más por el calor, mientras se lo pasan en grande con las actividades propuestas por los monitores, la música, y los juegos que acompañan a la fiesta.

Una propuesta diferente y llena de diversión espumosa para toda la familia durante este verano.